• El Estado debe garantizar educación y trabajo para los jóvenes. • Necesario darles la oportunidad para que con su esfuerzo y trabajo puedan lograr sus anhelos y propósitos. Morelia, Mich., a 30 de marzo de 2011.- Con relación a la propuesta de César Horacio Duarte, gobernador de Chihuahua, de que los jóvenes que no estudian ni trabajan - conocidos cono Ninis-, sean obligados a realizar el servicio militar por un periodo de tres años de manera obligatoria, como una forma de oportunidad de empleo y capacitación, Fidel Calderón Torreblanca, Secretario de Gobierno, manifestó que la Constitución permite que podamos decidir libremente sobre la actividad productiva a la que nos queramos dedicar siempre y cuando sea lícita, por lo tanto no se puede obligar a los jóvenes, que por distintas circunstancias no estudian ni trabajan, a incorporarse a la milicia. Puntualizó que pertenecer o no a las fuerzas armadas debe ser una cuestión de vocación de los jóvenes, pero de ninguna forma puede ser una medida obligatoria por parte del Estado. Incluso consideró que para muchos de ellos pertenecer a una institución como la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) puede ser motivo de orgullo, por lo que recomendó: “Quien tenga vocación en esa rama del servicio público, que lo haga”. El responsable de la política interna, manifestó que debiéramos estar pensando desde el Estado Mexicano y desde las instituciones, en ofrecerles a las y los jóvenes que se denominan “ninis - que son alrededor de 7 millones, posibilidades de estudio y trabajo. Destacó la necesidad de permitirles y garantizarles espacios en las instituciones públicas para que se preparen, pero esas instituciones, “deben vincular sus programas académicos a la vocación productiva de nuestro país, de nuestras regiones y de nuestros estados”. En el caso de la entidad, los programas académicos deberán vincularse con la vocación agrícola, turística, minera, cultural y logística, explicó. Los jóvenes son el 25 por ciento de la población, por lo que son un enorme potencial para el desarrollo del país, si les abrimos la puerta a la educación, a la capacitación y al trabajo, son un bono poblacional que se puede aprovechar para resolver problemas urgentes de México. Manifestó que los Jóvenes con educación y trabajo siempre serán mejores ciudadanos que participarán para servir a su comunidad. Consideró que “si propiciamos seres humanos felices, vamos a tener una sociedad mejor porque eso se transmite en tu primer círculo familiar y luego se transmite en el círculo social y de esa manera tenemos un mejor tejido social”. Abundó: Para que alcancen la felicidad los jóvenes tienen que dedicarse a algo que les guste y no que los obliguen, por eso a quienes les guste el servicio público y en particular la milicia que lo hagan, pero quienes tengan otro tipo de talento y vocación por el comercio internacional, la robótica, la ingeniería genética, la mercadotecnia, el turismo, las ciencias naturales, por la física, por las matemáticas y por las ciencias sociales, se les debe dar esa oportunidad de que se preparen en esa rama educativa y que en su momento pueda ejercer la profesión que le gusta para que puedan alcanzar la felicidad y ser realmente ser ciudadanos de bien. El servidor público dijo que cuando se es joven se está en la etapa de la vida más hermosa, en donde se tienen muchas ilusiones, se piensa en tener descendencia y se quiere tener su propia casa. “Hay muchas cosas que un joven piensa y planea y que le tenemos que dar la oportunidad para que lo haga, no regalársela, sino darle la posibilidad para que con su esfuerzo y trabajo pueda lograr cada uno de esos anhelos y propósitos, porque a la medida de que no los van alcanzando se van generando frustraciones que manifiestan después en otro tipo de actos anti sociales e incluso delictivos”.
